La energía se caracteriza por ser la fuerza vital de nuestra sociedad. De ella depende el calentamiento y refrigeración de nuestros hogares, la iluminación de exteriores e interiores, el transporte de mercancías y personas, el funcionamiento de las fábricas, la obtención de alimentos y su correspondiente preparación, etc.
Los distintos tipos de energía parten de los procesos de transformación que ésta sufre, ya que basados en la ley de la conservación de energía, entendemos que la energía no se destruye sino que se transforma.
Ingeniosamente, los seres humanos, hemos aprendido a aprovechar los distintos tipos de energía, inclusive, hemos llegado al punto de generar en base a las maquinarías y sustancias químicas la transformación de las energías de manera voluntaria, no esperando que los procesos sean realizados por acontecimientos externos.
¿Cuáles eran los tipos de energías utilizadas hace un siglo?
Hasta hace poco más de un siglo se usaba únicamente la energía que partía de la fuerza de los hombres y de los animales; también, del calor obtenido a través de la quema de madera.
En nuestra entonces civilización se había desarrollado ciertas maquinas a través las cuales se hacía uso de la fuerza hidráulica para preparar el hierro en ferreterías o moler los cereales, también era encausada la energía del viento en molinos de viento o barcos de vela.
¿Cuándo comenzaron a usarse los nuevos tipos de energía?
Gracias al desarrollo de la industria se comenzó a incursionar en nuestra sociedad el cotidiano uso de numerosos tipos de energía, siendo la creación de la máquina de vapor la apertura a la creación de nuestra sociedad moderna; la energía eléctrica, debido al auge tecnológico es la más usada a nivel mundial.
En la actualidad el desarrollo de los países se encuentran ligados al creciente uso de energía de combustibles fósiles como el gas natural, el carbón y el petróleo.