La energía obtenida por el movimiento del agua (energía hidráulica) ha permitido la creación de distintas maquinaras para su producción, entre ellas tenemos:
La energía obtenida en una central hidroeléctrica
Como se mencionó anteriormente, puede convertir la energía del agua en electricidad, siendo este el principal motivo por el cual son creadas. Al utilizar el agua de los embalses, las centrales hidroeléctricas son capaces de aprovechar la energía potencial de los mismos al favorecerse de los causes que posee un río.
El agua cae por una turbina que transforma la energía potencial en cinética, la cual atraviesa otra turbina para ser convertida finalmente en electricidad. Esta es la forma común de observar la energía hidráulica y también la más utilizada a nivel global.
El movimiento generado por los molinos de agua
Los molinos hacen uso de la energía cinética que posee un pequeño caudal de agua. Cuando el caudal choca con el molino, es capaz de mover cada uno de los segmentos de una rueda que se encuentra sumergida levemente en el agua.
A través del uso de engranajes, la rueda al moverse desplaza ciertas piedras redondas que se llaman muelas, las cuales sirven para aplastar un determinado tipo de grano y fabricar así la harina común.
Este dispositivo es conocido como rueda hidráulica y actualmente es utilizado para generar electricidad por medio de un transformador, teniendo un funcionamiento similar al de una presa hidráulica.
Claramente, la cantidad de energía que se obtendrá por medio de este dispositivo será mucho menor a la conseguida por las grandes plantas hidráulicas, por lo que se utilizan para actividades de bajo consumo energético.
El uso de las corrientes marinas
Es posible aprovechar la energía hidráulica de un océano gracias a las corrientes submarinas que este posee. Al instalar ciertos rotores por debajo de la superficie, es posible obtener esta energía cinética y convertirla en electricidad.