Si tomamos en cuenta ciertas actividades sencillas, aplicables en nuestra casa y en nuestro estilo de vida, mucho podríamos hacer por la fortaleza y salud de nuestro planeta tierra.
También podríamos tener acceso a un futuro más prometedor, además nuestra y las próximas generaciones agradecerían estas pequeñas pero importantes acciones.
7 acciones que reducirían el daño ambiental
Para empezar, habría que intentar ser conscientes y racionales con el uso de la energía tanto de calefacción como del aire acondicionado. Por esto, cada vez son más los que se decantan por otras vías de producción energética más ecológicas, como por ejemplo: los paneles solares térmicos, los paneles fotovoltaicos entre otras medidas posibles.
Sería una decisión más saludable y útil para el entorno ambiental tomar autobús público siempre que se pueda para reducir la cantidad de vehículos en las ciudades y, en consecuencia, el impacto ambiental generado por ellos.
A la hora de comprar o cambiar el auto, elegir un modelo más amigable con el ambiente, así como realizar una conducción eficiente y compartir el auto, podrían ser otras medidas positivas. Y, también siempre que sea posible, optar por la bicicleta o ir a pie, ya que estas también serán alternativas más ecológicas.
Tener siempre presente la fórmula de las tres “R”: reducir, reutilizar y reciclar.
- Reducir: comprar sólo lo necesario y priorizar con los productos reciclados y reciclables.
- Reutilizar: sacarles la máxima utilidad posible a los productos, darles un nuevo uso a los mismos y si se puede apostar por el intercambio de bienes de consumo.
- Reciclar: seleccionar los residuos para posteriormente llevarlos a los contenedores de reciclaje correspondientes.
Plantar árboles puede ser otra pequeña y grande actividad realizada para tratar de compensar la pérdida de bosques, grandes “sumideros de carbono”, ya que retienen el CO2 y liberan el oxígeno, tan necesario para nuestra existencia.
Para concluir, siempre quedará a nuestra merced hacer campañas de concientización y hacerse escuchar antes las instituciones y empresas para que adopten medidas destinadas a reducir el impacto ambiental.