El impacto ambiental es el efecto que una determinada acción humana genera sobre el medio ambiente en diversos aspectos.
Ahora bien, el desarrollo humano ha traído consigo una carga negativa que afecta su entorno.

La contaminación de océanos
Es uno de los principales males que arrastra el desarrollo humano. Prácticamente todos los desperdicios humanos son liberados en el mar. Cuando no se realiza de forma directa, el arrastre natural desde la superficie lleva estos desechos a ríos o corrientes subterráneas. El destino final es el mar.
El ecosistema marino es afectado a diario. Muchos residuos agrícolas se convierten en altos contaminantes, afectando al ambiente marino por largo tiempo. Los residuos de fertilizantes enriquecen de tal manera el agua, que existe sobrepoblación de algas disminuyendo la concentración de oxígeno.
Los residuos urbanos, industriales y radioactivos siempre terminan en el mar, modificando la vida o subsistencia de su flora y fauna. No podemos dejar por fuera los residuos petroleros. Lo cierto que el agua es fundamental para la vida de todos los seres, siendo la principal fuente contaminada por el desarrollo humano.

Nuevas tecnologías
El desarrollo tecnológico ha significado, en parte, un aliado contra el impacto ambiental. Muchos desarrolladores están dedicados a crear en función de utilizar la menor cantidad de energía posible. En consecuencia, lograr que el hombre pueda vivir, progresar y desarrollarse causando el menor daño posible al ambiente y a él mismo.
Sin embargo, se hace más que necesaria una debida y adecuada educación ambiental desde los primeros años de vida. Esto como una forma de entender mejor las nuevas propuestas en el ámbito de protección ambiental.
Pero también para adquirir la conciencia necesaria y entender que el ser humano es el epicentro del desarrollo de una sociedad. Como tal debe encaminarse hacia la generación de un futuro limpio, transparente, donde sea el protagonista del desarrollo sustentable.