En el planeta existen unos ambientes muy extensos donde se encuentra una gran cantidad de animales y plantas que están acostumbrados a unas características ambientales determinadas que guían su desarrollo, estos ambientes son llamados biomas y los mismos se encuentran regidos por diferentes cambios físicos como la temperatura y la energía.
¿Qué es la energía?
La energía es un tipo de corriente que se desarrolla gracias a una fuerza y vigor que es ejercida por un objeto o persona.
La energía tiene la capacidad de producir cambios físicos y de movimientos en cualquier tipo de sistema ya sea un objeto, en una persona o en distintos ambientes naturales.
A su vez existe un tipo de energía natural que es necesaria para la supervivencia de todos los ecosistemas de este planeta, esta energía esencial es la que proviene del sol.
Características de la energía
La energía es una fuerza esencial que se necesita para mover determinados objetos o que sirve para aportar vitalidad al cuerpo o a los ecosistemas. Este tipo de fuerza cuenta con características determinadas, estas son las siguientes:
- Muchas energías tienen la capacidad de ser almacenadas, una de las más conocidas son la energía térmica y la nuclear.
- La energía cumple con características determinadas que permiten que sea un tipo de fuerza medible por distintos objetos de estudio.
- La energía no se crea ni se destruye.
- Existen muchos tipos de energía y entre las más conocidas se encuentra la energía nuclear, la energía renovable, la energía eólica y la energía solar.
¿Cuál es el flujo de energía de los biomas?
La energía es un tipo de fuerza que es ejercida en distintos órganos y organismos con el fin de realizar algún tipo de movimiento, cambiar su posición o de administrarle vitalidad a distintos biomas.
La energía que necesitan los ambientes naturales es la energía solar, este es un tipo de energía esencial que proviene de la estrella más grande de nuestro sistema, el sol.
La energía solar fluye en los biomas a través de los rayos solares que llegan a la tierra y son captados por los animales y plantas, esta energía en las plantas ayuda a la realización del proceso de la fotosíntesis y a su vez ayuda a su crecimiento y desarrollo en los ecosistemas.
La energía solar en los animales da un efecto de vitalidad gracias a los rayos que transmite, a su vez estos rayos cuentan con elementos químicos que tienen la capacidad de darle fuerza y vitalidad a cualquier ser vivo siempre y cuando no sea en exceso.