La presencia de gases, partículas sólidas y sustancias toxicas suspendidas en el aire, hacen que este se contamine.
Los seres humanos somos los mayores productores de estos, pero en ocasiones parece que no estamos conscientes de las consecuencias de la contaminación del aire.
Consecuencias para la atmosfera
Cuando los gases tóxicos se acumulan en la atmósfera, se generan múltiples problemas ambientales. Entre las principales consecuencias de la contaminación del aire para la atmósfera, se encuentran el smog, la lluvia ácida y huecos en la capa de ozono. Estos, a su vez, incrementan otros problemas como el calentamiento global y el efecto invernadero.
Consecuencias para las plantas
Los agentes químicos presentes en la atmosfera pueden llegar a ser muy tóxicos y producir un sinfín de fenómenos. Estas consecuencias de la contaminación del aire alteran los ecosistemas, los seres vivos y, por consiguiente, a todo el planeta.
La disminución de plantas comestibles y las repercusiones en la evolución de las plantas, son algunas de las consecuencias de esta contaminación. Además, hay casos de plantas que dejan de realizar la fotosíntesis, lo cual impide la purificación del aire.
Consecuencias para el ser humano
La contaminación del aire también tiene consecuencias en el ser humano y su salud, pues la deteriora fácilmente. Las enfermedades más comunes originadas por la exposición continua a aire contaminado varían en gravedad. Pueden originarse alergias al polen, conjuntivitis, problemas de visión y asma.
Sin embargo, también se producen enfermedades más graves como problemas cardiovasculares, bronquitis o diferentes tipos de cáncer. Los más frecuentes son el cáncer pulmonar, el cáncer de piel o el cáncer en las vías respiratorias.
Las mujeres embarazas también deben ser particularmente cuidadosas y tomar medidas preventivas cuando se encuentren en una zona donde el aire esté muy contaminado. Los fetos son muy vulnerables y el aire contaminado puede producir defectos en el desarrollo mental de los nonatos.