Ese órgano vital del cual hacemos uso a diario para poder comprender todo cuanto nos rodea, procesar información, conectar nueva información con recuerdos o información almacenada, reconocer rostros familiares o asociar desconocidos con alguna actividad.
Entre tantas cosas, resulta a veces tan familiar que solemos pasarlo por alto.
Es así como tenemos un cerebro que a veces no tomamos en cuenta. ¿Te has preguntado alguna vez cuál es en sí la función del cerebro?
A continuación te hablaremos brevemente de ello, para que puedas descubrir datos interesantes que podrían beneficiarte en la forma como haces uso de ese órgano trascendental para nosotros.
Debes saber que desde un punto de vista evolutivo el cerebro es un órgano que ejerce control centralizado sobre los demás órganos del cuerpo. Genera patrones de actividad muscular y además produce la secreción de sustancias químicas llamadas hormonas. De manera que la función del cerebro es completa, a nivel físico y químico permitiendo que sean posibles las acciones humanas y el comportamiento de los órganos que le compone.
El cerebro entonces ejerce una función de control. Todo cuanto el hombre puede hacer responde a la capacidad del cerebro de poder ejercer control sobre el cuerpo. El hecho de que cumpla con un rol de control centralizado garantiza la respuesta inmediata y la coordinación frente a los distintos cambios que se presentan en el entorno del individuo.
La capacidad de razonar y adaptarse depende del cerebro.
Es por ello que debe cuidarse, y proporcionarse el descanso requerido para que así su control sobre el resto del cuerpo sea eficaz brindándonos siempre la capacidad de responder adecuadamente frente a cualquier situación.
El cerebro forma la estructura física que le da vida a la mente.
Es así como incluso la capacidad de sentir placer, tristeza, alegría y cualquier emoción, depende de una cerebro sano y en buenas condiciones.