No hay nada más importante que la salud y la belleza. La belleza no debe atentar contra la salud, así como cuidar nuestra salud no estropea nuestra belleza. Estos dos elementos van tomados de la mano.
Incrementar nuestra belleza siempre equivale en trabajar para tener una buena salud.
Es así como los regímenes de dietas siempre apuntas, cuando son diseñados por profesionales, a mantener un equilibrio en nuestros cuerpos. En cuanto al cabello es igual. No se puede tener un buen aspecto en nuestro cabello sin que este pueda lucir saludable.
Es por ello que en el afán de poder ajustar nuestro color de cabello a distintas ocasiones no podemos desestimar un tratamiento correcto, incluso cuando se trata de decolorar el cabello, es mejor recurrir a métodos que no atenten contra su salud.
Cualquiera que sea el decolorante que decidas utilizar, asegúrate de asesorarte sobre qué tan fuerte es o cómo afecta la salud de tu cabello.
Para cuidar la salud de tu cabello, la condición que debes tomar en cuenta en primer lugar es tener el cabello completamente seco antes de comenzar la aplicación. Luego, con una brochita para teñir aplícatelo desde la raíz hasta la punta.
Deberás mantener tu cabello decolorado separado del que falta por decolorar. Para ello separa el cabello con pinzas o con cuadrados de papel aluminio, así podrás tener varias secciones para aplicar el decolorante sin afectar tu cabello por un exceso del mismo.
Divide tu cabello en dos secciones principales, la delantera y la trasera. Comienza con la sección delantera. Una vez que has terminado con esta sección, lávatela y luego aplica el decolorante a la sección trasera de tu cabello.
Otra de las consideraciones que deberás tomar en cuenta es que el decolorante deberás dejarlo actuar en tu cabello en un tiempo comprendido entre quince y treinta minutos. Recuerda que entre más tiempo dejes el decolorante en tu cabello más claro quedará.